La clave para estabilizar el precio de la gasolina

Artículo de Opinión escrito por Carlos Aurelio Hernández   /  Presidente de la Comisión Nacional de Energía de COPARMEX | Vía: @elsolde_mexico

X: @cauhdez

Sin lugar a duda, la estabilidad en el precio de la gasolina regular es esencial para la seguridad energética y el bienestar de los mexicanos. El Gobierno Federal debe crear las condiciones necesarias para garantizar un suministro continuo y a precios accesibles, impulsando así el desarrollo económico y social.

El reciente Acuerdo Nacional para Estabilizar el Precio de la Gasolina Regular abre un diálogo constructivo entre las empresas y las autoridades federales. La apertura mostrada por el Gobierno con toda la cadena de valor del sector gasolinero es un paso que permitirá incorporar elementos de certidumbre para fortalecer las inversiones en el sector petrolífero.

Sin embargo, es importante destacar que la intervención estatal a través de controles de precios, como la imposición de un precio tope, puede generar distorsiones significativas. Establecer un límite en la venta de gasolina podría provocar escasez al no permitir condiciones viables para que las empresas operen con rentabilidad, lo que derivaría en desabasto y afectaría la actividad económica del país.

Además, los precios tope mal aplicados en cualquier actividad económica siempre incentivan los mercados ilícitos y las prácticas corruptas, al mismo tiempo que pueden disminuir la calidad del producto y generar impactos negativos en el medio ambiente. Controlar los precios distorsiona la información clave de la oferta y la demanda, lo que puede llevar a decisiones erróneas, mermar la inversión y desacelerar la innovación en el sector.

Es fundamental eficientar las operaciones aduaneras para facilitar el libre tránsito de productos que cumplan con las normativas vigentes. Asimismo, incrementar y agilizar el otorgamiento de permisos para infraestructura, como el almacenamiento de combustibles e hidrocarburos, permitirá a México contar con mayores alternativas de suministro y fortalecer la seguridad energética, lo cual contribuirá a precios más competitivos.

Establecer mecanismos de control de precios sin contemplar las condiciones económicas, financieras, regionales y logísticas del mercado podría generar efectos adversos. Por ello, es esencial que dichos mecanismos reflejen las condiciones operativas y financieras de Pemex, principal proveedor de gasolinas en México, para evitar repercusiones negativas tanto en la empresa pública como en la competitividad del sector.

El Gobierno debe continuar con las mesas de diálogo. Solo a través del consenso se podrán alcanzar soluciones que cumplan con los objetivos de política pública en materia de combustibles, al tiempo que se mantengan e incrementen las inversiones y los empleos en el sector gasolinero, combatiendo el mercado ilícito y minimizando el impacto en las finanzas públicas.

Fortalecer la seguridad energética y garantizar que los mexicanos tengan acceso a combustibles a precios accesibles es un desafío que requiere el trabajo conjunto de todos los actores, todos los días. Solo así se brindarán a los consumidores finales más y mejores opciones, consolidando un mercado energético moderno, competitivo y sostenible para el futuro de México. #OpiniónCoparmex