- Las Fuerzas Armadas deben cumplir con sus funciones y no distraerse en
tareas que le son ajenas. - Ante la creciente inseguridad, la solución no es la militarización del país.
En la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) advertimos que
la iniciativa del Ejecutivo Federal que plantea reformar, adicionar y derogar diversas
disposiciones de la Ley Orgánica de la Administración Pública Federal, de la Ley de
la Guardia Nacional, de la Ley Orgánica del Ejército y Fuerza Aérea Mexicanos y de
la Ley de Ascenso y Recompensas del Ejército y Fuerza Aérea en materia de
Guardia Nacional y Seguridad Pública, altera el espíritu constitucional y se convierte
en una militarización de facto de la Guardia Nacional.
Además, nos parece muy preocupante que se pretenda que la propuesta, que en
los hechos no fue presentada como iniciativa preferente, sea aprobada fastrack (o
al vapor) sin una amplia deliberación donde se analicen a fondo las implicaciones
operativas y administrativas de un tema tan relevante para la vida de las familias
mexicanas, como es la seguridad pública.
Consideramos que la pretendida reforma contradice lo establecido en el Artículo 21
de la Constitución que dicta que “las instituciones de seguridad pública, incluyendo
la Guardia Nacional, serán de carácter civil” y que con ella se pretende generar,
además, una maniobra para aparentar que la adscripción de la Guardia Nacional
permanecerá bajo la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), pero
la toma de decisiones y la ejecución de instrucciones y operaciones estarían a cargo
de la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA).
Reiteramos que esta maniobra altera el espíritu constitucional y refleja una profunda
contradicción frente a los compromisos de campaña expresados por el titular del
Ejecutivo Federal y los acuerdos legislativos alcanzados en la materia.
Así mismo, de aprobarse el proyecto generará todavía más problemas operativos y
administrativos, pues quedan confusas las áreas de responsabilidad tanto de la
SSPC como la SEDENA, pues serían dos instituciones y no una, las encargadas de
ejercer las funciones de seguridad pública en nuestro país.
Más aún, en materia de formación y desempeño de los integrantes de la Guardia
Nacional hay también una contravención a la Carta Magna, ya que con esta reforma
las instituciones policiales ya no se regirán por una doctrina policial, sino por una
doctrina militar.
En ese sentido es necesario recordar que el titular del Poder Ejecutivo protestó en
su toma de posesión guardar y hacer guardar la Constitución Política de los Estados
Unidos Mexicanos, por ello, desde Coparmex, hacemos un llamado para que honre
su juramentación; como sociedad hoy se lo demandamos. La Constitución debe
acatarse, no existe razón alguna para violentar nuestra Carta Magna y mucho
menos para apostar por la militarización del país.
Por otro lado, las Fuerzas Armadas merecen todo nuestro reconocimiento, pues
desempeñan con eficiencia sus labores de defensa de la soberanía, de la seguridad
nacional y de atención a la población en situación de desastres naturales, pero
estamos convencidos que se debe respetar su vocación y no distraerse al ejercicio
de funciones que les son ajenas.
Por ello, en Coparmex exigimos que más allá de buscar soluciones en la
militarización del país, se reformule la estrategia de seguridad de manera integral,
pues a casi cuatro años de este gobierno, vivimos una severa crisis de violencia que
ha dejado una cifra de 133 mil 134 víctimas de homicidios dolosos, es decir 99
víctimas de homicidio por día.
Es apremiante que se fortalezcan las instituciones de seguridad civil a nivel federal,
estatal y municipal, para que ejerzan de manera diligente y correcta sus funciones
preventivas, reactivas y de investigación y para que la intervención de las fuerzas
federales sea complementaria y subsidiaria y no de sustitución.
Para lograr este fin es necesario que exista coordinación y se apueste de manera
clara y decidida por la inteligencia para la prevención del delito y se retomen
esquemas de formación y certificación policial para contar con cuerpos de seguridad
que respondan a las necesidades actuales y futuras de la sociedad.
Los mexicanos requerimos con urgencia policías fundadas en el servicio a la
sociedad, con disciplina, respeto a los derechos humanos, al imperio de la ley, al
mando superior y con perspectiva de género.
El llamado de Coparmex es para que la improvisación se sustituya por una correcta
planeación, con responsabilidad, para así conquistar el anhelo de recuperar la
tranquilidad en las calles y vivamos en un México con Estado de Derecho y en paz.