Recientemente vivimos las elecciones más grandes de la historia de México.Millones de mexicanos ejercimos en libertad nuestro poderoso derecho a votar y así reafirmar nuestro compromiso con la democracia. Mi voto fue recibido y contado por mis vecinas y mis vecinos quienes con su esfuerzo nos brindaron la certeza de los resultados electorales. Mi voto también fue vigilado por miles de observadores electorales.
Los resultados definitivos probablemente se conozcan hasta el mes de agosto, esto derivado de las diferentes impugnaciones ante el TRIFE. En esta nueva etapa esperamos que los diferentes actores políticos, así como las autoridades vivan en todo momento el principio de la legalidad, la neutralidad y que se conduzcan con civilidad respetando la voluntad ciudadana.
Las campañas políticas terminaron, lamentablemente, manchadas por la violencia física y verbal, polarizadas por las distintas ideologías partidistas donde encontramos muchas descalificaciones y, en algunos momentos, pocas propuestas.
Mi voto vale mucho, pero la democracia no acaba con el ejercicio de éste, es el inicio; ahora exijo. El partido ganador deberá gobernar para todas y para todos, incluso por quienes no votaron por ellos, ese es el verdadero reto del gobierno.
La sociedad civil ha jugado un papel muy relevante en estos comicios. Además de escuchar con atención las propuestas de los candidatos también ha logrado transmitir las principales necesidades que como sociedad tenemos.
Lo más trascendente han sido los compromisos que los candidatos han firmado con las diferentes agendas ciudadanas. Con la participación de las OSC, los actores políticos se han comprometido en temas tan importantes para el país como son: la reactivación económica y desarrollo inclusivo, seguridad y justicia, combate a la corrupción, rendición de cuentas, educación de calidad, medio ambiente, así como la prevención y atención a la salud.
¡Este es el momento de los ciudadanos! Nuestro voto fue un ejercicio de rendición de cuentas para las y los candidatos, así como para sus partidos políticos. Ha llegado el momento de exigir, todos ellos se deben a la ciudadanía.
Es hora de actuar, y no esperar 3 años hasta el próximo proceso electoral. Es momento de dar seguimiento, evaluar, exigir rendición de cuentas, pasar de ser espectadores para ser protagonistas de esta democracia que se teje día con día.
Como ciudadanos, fortalecer las instituciones es también nuestra tarea, lograr que se alejen de los intereses particulares, de los partidos políticos o los gobierno. La agenda debe ser siempre la búsqueda del Bien Común.
La cultura cívica va más allá de nuestra participación en los procesos electorales, tenemos frente a nosotros una nueva oportunidad de seguir participando activamente en la vida democrática de nuestro país. #OpiniónCoparmex
Vicepresidenta Desarrollo Social Coparmex.
