Preámbulo
Así debe ser, ellos deben ser primero, por desgracia en los últimos años se les ha dejado en el olvido y se les ha dado la espalda. Ha quedado claro que el bienestar de las niñas y niños no se alcanzará solo por las acciones del gobierno, requiere un compromiso integral de toda la sociedad, incluido el sector privado. Por eso, el Modelo de Desarrollo Inclusivo que impulsamos en COPARMEX busca garantizar que accedan de forma equitativa a oportunidades de educación y salud, esa debe ser la base para su felicidad; en la construcción de un futuro próspero y sostenible para la infancia mexicana la innovación, los recursos suficientes y la colaboración de todos son fundamentales.
¿Cuál es la situación actual de la niñez?
En México, la situación social, educativa y de salud de las niñas y niños es preocupante:
Más niños pobres y víctimas de explotación
- Entre 2018 y 2020, la pobreza infantil y adolescente en México aumentó en 2.3 puntos, dejando a 1 de cada 2 personas de entre 0 y 17 años en condición de pobreza multidimensional según datos de CONEVAL. Según la Encuesta Nacional de Trabajo Infantil del INEGI, en 2022, 3.7 millones de niñas, niños y adolescentes de 5 a 17 años realizaban trabajo infantil.
- Datos de REDIM indican que en México, alrededor de un tercio de las víctimas de trata son menores de edad, lo que equivale a unos 28 casos de explotación infantil al mes en promedio. Además, el país se sitúa como el tercero a nivel global en trata de personas con fines de explotación sexual y mendicidad de menores, según datos de la organización internacional A21, quedando solo detrás de Tailandia y Camboya.
Regresión integral en materia educativa e inversión
- La regresión no sólo es en aprendizajes, sino en inseguridad. Datos de Educación con Rumbo señalan que la percepción de inseguridad en las escuelas es del 31.5% a nivel nacional; además, ocho de cada diez niños van a la escuela sin un desayuno adecuado, lo que impacta en su aprovechamiento.
- Nuestro país invierte sólo el 4.6% de su PIB en educación, comparado con el 5.3% promedio de los países de la OCDE[1], y gasta apenas 3,239 dólares al año, mucho menos por estudiante que el promedio de la OCDE que es de 12,647 dólares, es decir, México invierte apenas una cuarta parte que el resto de los países de ese organismo internacional.
- Según información del Formato 911, el 64.8% de las escuelas en México carecen de servicios básicos adecuados, lo que representa un déficit significativo en la infraestructura escolar: 20.6% no tiene lavamanos, 24.8% no tiene sanitarios, 12.6% no tiene electricidad.
- Mexicanos Primero estima que se necesitarían casi 52 mil millones de pesos adicionales para dotar a todas las escuelas de servicios básicos adecuados, lo que representa un aumento del 6% en el presupuesto actual de educación, que es apenas el 10% del costo estimado del Tren Maya (515 mil millones de pesos).
- Según el Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF), en 2024 se destinarán un billón 19 mil 449 millones de pesos; a pesar de que el monto es el más alto de este sexenio, es 3.6% menor en términos reales, en comparación con 2015, el año analizado con mayor presupuesto.
- Según el IMCO, 6.4 millones de niños y jóvenes en México no asisten a la escuela que representa el 18% de la población entre 3 y 18 años, y el rezago educativo afecta al 10% de la población en edad escolar.
En materia de salud hoy los niños son más vulnerables
- Según CONEVAL, en 2022 el 42.3% de la población de 0 a 17 años en México carecía de acceso a servicios de salud, lo que equivalía a 15.7 millones de niñas, niños y adolescentes.
- En México 1 de cada 20 niñas y menores de 5 años padece sobrepeso u obesidad, lo cual aumenta a 1 de cada 3 en niños mayores de 5 años. Esto coloca a México entre los primeros lugares en obesidad infantil de acuerdo con la UNICEF México.
- Según la Ensanut, durante 2022, sólo el 26.6% de las niñas y niños de 2 años en México recibieron el esquema completo de vacunación. México es uno de los 10 países con mayor número de niños sin inmunizar contra enfermedades como difteria, tétanos, tosferina y sarampión.
Recomendaciones
Para abordar de manera efectiva los desafíos en educación y salud infantil, proponemos:
1. Inversión prioritaria: Se requiere más inversión y destinar recursos suficientes en programas y servicios dirigidos a la infancia, priorizando la educación y la salud como pilares del desarrollo humano.
2. Acceso equitativo: Promover la equidad de género y la inclusión social para garantizar que todas las niñas y niños, independientemente de su origen socioeconómico o geográfico, tengan acceso igualitario a oportunidades educativas y servicios de salud.
3. Participación conjunta: Fomentar la participación de las mamás y papás, de la sociedad civil, las comunidades locales, las organizaciones no gubernamentales y al sector empresarial en la formulación e implementación de políticas y programas orientados a la infancia. Nadie puede solo.
4. Monitoreo y evaluación: Debemos regresar a esquemas de evaluación para medir avances y retrocesos en educación y salud infantil, con el fin de identificar áreas de mejora y asegurar el cumplimiento de los derechos de la infancia.
5. Empoderar con conocimiento a las y los maestros: Los docentes son un actor clave, se les debe tomar en cuenta, apoyarlos para que se profesionalicen, para que cuenten con más y mejores materiales, y un trato digno. Ampliar sus derechos a la par que sus obligaciones.
El llamado de COPARMEX
COPARMEX participa activamente en iniciativas como la Red de la Primera Infancia del Consejo Coordinador Empresarial y en el Pacto por la Primera Infancia. Celebramos que los tres candidatos presidenciales hayan firmado dicho pacto, el cual incluye objetivos ambiciosos para mejorar las condiciones de vida de la infancia en México como disminuir la pobreza y la pobreza extrema; reducir la desnutrición crónica, anemia, sobrepeso y obesidad en menores de 5 años; incrementar la lactancia materna; asegurar que todos los niños reciban las vacunas correspondientes; brindar atención especializada a niños con discapacidad; promover un adecuado desarrollo infantil temprano; ampliar la cobertura de educación inicial; y combatir todas las formas de violencia contra la infancia.
Las y los niños son prioridad en las familias y deben serlo también a nivel social. Es crucial que las autoridades, instituciones educativas, profesionales de la salud y la sociedad trabajemos juntos para proteger y promover sus derechos. Ser un mejor país pasa por apostar por la formación de mejores ciudadanos, la visión que tenemos de un México con Desarrollo Inclusivo pone a los niños en el centro y promueve las condiciones para que nadie se quede atrás. Solo habrá transformación, si se protege e impulsa a los más vulnerables.