Artículo escrito por Luis Durán, Director General de Strategy Primus y Presidente de la Comisión Nacional de Educación de la COPARMEX.
Twitter: @LuisEDuran2
Albert Einstein alguna vez dijo: “si quieres conocer el futuro, mira el pasado”. Para todos los que hemos vivido en 2020, uno de los años más retadores de la historia, deseamos que el 2021 no cumpla con lo que decía el gran genio alemán del siglo pasado. Como hemos comentado en esta columna, a pesar de muchos de los retos que vivimos el año pasado, también hemos visto oportunidades y cambios positivos. Sin embargo, nadie en su sano juicio quisiera para este año que comienza nada remotamente parecido al 2020.
Ahora bien, ¿qué podemos esperar de este nuevo año? A los economistas nos gusta proyectar lo que va a ocurrir en el futuro. Pero como bien decía el economista y filósofo estadunidense John Kenneth Galbraith “la única función de las proyecciones económicas es hacer que la astrología parezca respetable”. Y para ejemplo basta un botón, después de la pandemia de la influenza española, cuando comenzaba el 1921 una de las predicciones, en este caso del periódico Evening News de Harrisburg, la capital del estado de Pensylvannia en Estados Unidos, predecía que “México se convertiría en una potencia más grande que cualquiera en Europa”. Evidentemente no resultó una predicción correcta. Tomando un poco de estas imprecisiones históricas en cuenta, podemos revisar lo que nos dicen los expertos en cuatro grandes áreas: el impacto del COVID, la economía wellness, las empresas y marcas enfocadas a los valores, y el uso de oficinas y herramientas tecnológicas.
Lo primero y lo más fácil de predecir es que el virus va a seguir afectando a la economía global, aunque la mayoría de los expertos vaticina que para la segunda mitad del año la disponibilidad de las vacunas irán permitiendo que la normalidad vaya regresando. Lo que queda por ver es si COVID-19 dominará las predicciones del 2022, o si podremos mirar más allá de la era pandémica después de este año.
Una tendencia que muchos expertos coinciden es en el enfoque en el wellness de las personas sobre lo que ya hemos escrito en esta columna. Las personas y los empleadores comienzan a tomar en serio el bienestar. Está claro que el año pasado no fue bueno para nuestra salud mental colectiva. En respuesta, muchas empresas están buscando formas de apoyar a los empleados desde el punto de vista de la salud y el bienestar. Este enfoque en el bienestar persistirá, incluso cuando las personas comiencen a regresar a la oficina. A medida que los arrendamientos comerciales expiren en 2021, las empresas volverán a evaluar sus necesidades de oficina, y muchos expertos creen que el bienestar tendrá en cuenta esas decisiones.
Estas tendencias se relacionan con el tema más amplio de las empresas impulsadas por los valores. Si las marcas profesan el deseo de impactar a la sociedad de una manera positiva, los empleados y los consumidores exigen cada vez más que las acciones se extiendan hacia adentro de las organizaciones también. Específicamente hablando de las marcas, estas deben ser auténticas y estar orientadas al bien común. En los últimos años, las marcas se han vuelto cada vez más impulsadas por un enfoque hacia el beneficio de la sociedad. En sus predicciones 2021, los expertos ven que esta tendencia será parte integral de las estrategias aún más. Los Millennials, que ahora son la generación más grande de la fuerza laboral, están dando forma a la sociedad a su propia imagen, y la expectativa es que las empresas tengan una voz auténtica y que las acciones se alineen con las palabras. Esta tendencia se ve aumentada por la transparencia que el internet y las redes sociales han fomentado.
Finalmente, un gran replanteamiento de la vida de oficina y el uso de herramientas tecnológicas está en marcha como nunca antes. El gran experimento de trabajo remoto pronto se acercará a la marca de un año y muchas cosas han cambiado en este corto periodo de tiempo. Incluso las empresas que eran increíblemente resistentes al trabajo remoto se encontraban en una posición de tener que adaptarse a las nuevas circunstancias debido a la pandemia. Ahora que se ha demostrado la viabilidad del trabajo a distancia, será difícil para las empresas volver a los tiempos pre-pandémicos. Durante 2021, millones de empresas comenzarán la reingeniería de todo, desde oficinas físicas hasta infraestructura digital, y esto tiene amplias implicaciones en la economía y nuestra cultura.
A final de cuentas el 2021 lo podemos ver de muchas maneras, pero no hay duda que, ademas de los grandes retos que tenemos enfrente, será un año lleno de posibilidades y oportunidades. Todo depende de cómo tomemos los desafíos que claramente todavía existen. En ese sentido me quedo con la frase del brillante escritor y teólogo C.S. Lewis: “No puedes volver atrás y cambiar el principio, pero puedes comenzar donde estás y cambiar el final”. A cada quien nos toca construir nuestro propio 2021.
Consulta la versión original en: El Universal, ¿Qué sigue en el 2021?