Por: Juan Manuel Hernández Niebla Presidente de la Comisión Nacional de Seguridad y Justicia para El Sol de México
“No hay camino para la paz, la paz es el camino” Mahatma Gandhi
Elaborado por el Instituto de la Economía y la Paz, el Índice de Paz México (IPM) mide, desde 2003, la evolución de los índices de violencia en México.
El IPM utiliza la metodología del Índice de Paz Global, la más reconocida para medir la paz a nivel mundial.
Medido por cada 100 mil habitantes (TCH), el Índice de Paz México analiza siete indicadores básicos: homicidios, delitos con violencia, delitos con armas de fuego, eficiencia del sistema judicial, presos sin condena, financiamiento de las fuerzas policiales y los crímenes de la delincuencia organizada.
Cada uno de los indicadores recibe un valor del 1 al 5, donde 1 representa la calificación más pacífica y 5 la menos pacífica. En la medida que se acerca al “1”, una entidad tiene el índice de paz más alto.
En su reporte 2020, el IPM reporta un incremento nacional en la violencia de 4.3 por ciento, deteriorándose por cuarto año consecutivo, incluyendo un incremento de 1.4 por ciento en homicidios, y 3.4 por ciento en delitos con violencia, guiado por un incremento de 18.3 por ciento en delitos sexuales.
Comparado al año anterior, nueve estados muestran mejoras y 23 retrocesos.
El nivel de paz en México se ha deteriorado 27.2 por ciento en los últimos cinco años, dictada principalmente por la tasa de homicidios que se incrementó 86 por ciento al pasar de 15 muertes por tasa de 100 mil habitantes en 2015 a 28 en 2019, donde la tasa de delitos sexuales se incrementó en 60 por ciento.
Desde 2015, la tasa de crímenes de la delincuencia organizada ha incrementado 46 por ciento, donde los delitos de narcomenudeo crecieron 75 por ciento y la violencia con armas de fuego creció 117 por ciento.
El homicidio es la principal causa de muerte entre personas de 15 a 44 años, y la cuarta más frecuente entre niños de 5 a 14 años.
Pese a la oleada de violencia, México gasta sólo 0.7 por ciento del PIB en seguridad y justicia, la tasa más baja entre los países miembros de la OCDE.
El número de detenidos sin sentencia creció 24.9 por ciento durante 2019, catalogando al estado con una de las cifras más altas de México.
En relación con el impacto económico de la violencia, este ascendió a 4.57 billones de pesos, equivalente a 21.3 por ciento del PIB nacional.
El impacto económico de la violencia fue de 36 mil 129 pesos por persona, equivalente a cinco salarios mínimos mensuales.
Finalmente, el IPM calcula que durante los 13 años de la guerra contra las drogas han sido asesinadas 175 mil personas.
Una cifra igualmente alarmante es que durante los últimos 20 años en Mexico se han cometido mil 524 asesinatos contra periodistas.
Los números aquí presentados son oficiales, México vive una verdadera tragedia en materia de seguridad, y desafortunadamente no se vislumbra una estrategia clara de las autoridades en el tema.