• Carece de medidas efectivas a favor de la reactivación económica, queda a deber en materia de inversión pública diversificada.
• Recortes al INE y al Poder Judicial ponen en riesgo la democracia, la implementación de la reforma laboral y los acuerdos del TMEC.
• Indispensable dotar de más recursos a la SE y SECTUR para impulsar el crecimiento y más apoyo a MiPyMEs.
En la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) consideramos que el Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) 2022 aprobado en lo general en la Cámara de Diputados, no responde a la situación adversa por la que atraviesa el país, por lo que debe existir una reasignación de recursos acorde a los desafíos actuales.
Pese a que la propuesta de presupuesto partía de premisas adecuadas como la expansión del gasto, mayor inversión y énfasis en salud, la iniciativa aprobada por los legisladores se aleja del objetivo de incentivar la reactivación económica y atender los retos en educación, salud y seguridad.
En Coparmex consideramos que es necesario destinar mayores recursos a la Secretaría de Economía (SE) y a la Secretaría de Turismo (SECTUR) para impulsar la reactivación económica a través de programas de apoyo a las Micro, Pequeñas y Medianas Empresas (MIPyMEs) y a la promoción turística.
Más aún, toda vez que el PEF 2022 es el reflejo de las prioridades del Gobierno de México, creemos que, pese a que en materia de salud se registró un incremento presupuestal, este no resulta suficiente para atender los programas de prevención de enfermedades y resolver de manera inmediata el desabasto de medicamentos. La salud sigue estando de lado.
Es importante que, ante la creciente inseguridad registrada en distintos puntos del país, el Presupuesto de Egresos debiera contemplar una mayor asignación presupuestal para el combate a la delincuencia, la prevención del delito y el fortalecimiento de los cuerpos de seguridad.
Más aún, en Coparmex reiteramos la necesidad de que exista una reasignación del presupuesto, pues destinar solo el 3.1 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) para educación, es decir, gastar 8.5 pesos de cada 100 del presupuesto en la formación de la niñez y juventud, es insuficiente.
Esta situación se agrava si consideramos los retos actuales del sector educativo, como el acondicionamiento de instalaciones y el establecimiento de protocolos para el regreso presencial a clases, además de los rezagos y la deserción escolar ocasionados por los efectos de la pandemia en el país.
En Coparmex vemos como positivo que en el PEF 2022 la inversión pública tenga un aumento real del 14.3 por ciento, sin embargo, nos preocupa que el 55 por ciento de este gasto está destinado a energía, mientras que menos del 4 por ciento está orientado a educación y salud.
Por otro lado, observamos con preocupación que la Cámara de Diputados plantee un recorte al Instituto Nacional Electoral (INE), que con una disminución de 4.9 mil millones de pesos (20 por ciento menos de lo solicitado), deberá organizar seis elecciones estatales el próximo año, así como la consulta de revocación de mandato.
Advertimos también que en el dictamen existe una reducción de 3 mil millones de pesos al Poder Judicial que impacta en mayor medida al Consejo de la Judicatura (98 por ciento) y el resto a la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), lo que pone en riesgo la implementación de la tercera y última etapa de la reforma laboral, crucial para cumplir los acuerdos establecidos en el TMEC.
Desde Coparmex hacemos un llamado a los Diputados para que otorguen a los ramos autónomos un presupuesto suficiente para garantizar sus operaciones y mandatos, pues las reducciones ponen en riesgo nuestra democracia y el cumplimiento de los acuerdos comerciales de nuestro país.
México requiere de un PEF que habilite a las dependencias y órganos de gobierno para llevar a cabo acciones encaminadas a procurar la recuperación económica, la salud, la seguridad, el desarrollo y el bienestar social.