La Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), hizo un llamado al Congreso de la Unión para considerar una revisión a detalle en materia fiscal y corregir las deficiencias de la reforma fiscal vigente desde 2014.
El sindicato patronal apuntó que es el momento clave para que no necesariamente se tome al pie de la letra lo que el gobierno ha señalado, sino que se revisen las propuestas que se han hecho en materia fiscal, por expertos técnicos de diversas instituciones y especialistas, a las que Coparmex se ha sumado con el propósito de terminar con malas decisiones que han afectado a los contribuyentes.
Por otra parte, señaló que México se ha convertido en un país caro, particularmente si se compara con sus socios comerciales de la OCDE para las empresas, destacó que es indispensable avanzar en medidas que le den certidumbre jurídica a los contribuyentes, así como en medidas orientadas a la simplificación fiscal, “desafortunadamente nuestro sistema fiscal se ha vuelto complejo por la gran cantidad de formalismos que se deben cumplir”.
El dirigente nacional de Coparmex, Gustavo de Hoyos Walther señaló que el impuesto corporativo en México es de los más caros de la OCDE, y el planteamiento que se ha hecho es que “haya una disminución gradual, responsable, de un punto por año para llegar al 25 por ciento que es la tasa promedio, no la más baja, la tasa promedio de las economías de la OCDE”.
“No hay que perder de vista que a partir del 2014 se incorporó un impuesto del 10% a las utilidades que pagan las personas morales a las físicas, dicho impuesto es adicional a la tasa máxima del 35% que se puede alcanzar como persona física. Elevar las cargas impositivas es una medida que afecta la inversión y con ello al crecimiento y generación de empleos”, agregó.
Para Coparmex, otra propuesta que debe revisarse por parte de los legisladores, es la de recuperar la deducibilidad plena para las empresas en materia de prestaciones laborales, ya que si bien se busca la generación de más empleos dignos en México, esto se debe fortalecer con acciones enfocadas a fortalecer dichas prestaciones ya que con la reforma fiscal las limita.
Para el organismo patronal, no es la mejor política pública elevar el costo del empleo formal, ya que más del 57% de la población labora en la economía informal y la deducción parcial de prestaciones laborales se ha traducido en una afectación en la calidad de vida de los trabajadores.